Daños al acuífero, incumplimientos de permisos ambientales y riesgo inminente para la integridad y vida de los trabajadores, fueron algunos de los factores que determinaron la resolución del Primer Tribunal Ambiental de Chile. Lundin, los dueños de Josemaría en San Juan, fue denunciada por “daño irreparable al ambiente” por el Consejo de Defensa del Estado (CDE).
Ante esto, el Tribunal Ambiental decretó la suspensión temporal y provisional de las faenas mineras del proyecto “Continuidad Operacional Mina Alcaparrosa”.
Según precisaron en un comunicado, la determinación -de acuerdo con lo solicitado por el CDE- puede extenderse el tiempo que dure el juicio y durante su vigencia se permitirá solo la ejecución de las medidas que la Superintendencia del Medio Ambiente u otros órganos con competencia ambiental hayan determinado con el fin de prevenir eventuales riesgos.
El tribunal tomó la decisión al estimar que se cumplen dos de los requisitos fundamentales establecidos en el caso de las medidas cautelares y que tienen relación con la verosimilitud de la pretensión invocada (fumus boni iuris) y en la necesidad de impedir los efectos negativos de los actos o conductas sometidos al conocimiento del órgano jurisdiccional (periculum in mora).
Lo anterior, luego de revisar y analizar los antecedentes aportados por el CDE en su calidad de demandante; los informes de diversos servicios sectoriales competentes; la Dirección General de Aguas (DGA); la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) y el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin); así como los recabados por el tribunal en la diligencia judicial efectuada el pasado 1 de junio.
Entre los factores que el órgano jurisdiccional tuvo a la vista a título ejemplar para decretar la medida estuvieron: la eventual afectación al acuífero del Río Copiapó, los incumplimientos de la empresa minera respecto de sus permisos ambientales, y el riesgo inminente para la integridad y vida de los trabajadores de la faena minera.
A fines de mayo pasado, el Consejo de Defensa del Estado le había solicitado intervención al Tribunal Ambiental para suspender la mina. El CDE demandó a la Compañía Minera Ojos del Salado y Lundin Mining por el desplome de material que se produjo en la Mina Alcaparrosa lo que provocó un socavón de 36 metros de diámetro en la comuna de Tierra Amarilla.
En la demanda aseguró que hubo una “evidente negligencia” de las y afirmó que “a fin de aumentar sus márgenes de ganancia fueron más allá de lo autorizado ambientalmente en la faena minera y terminaron generando el daño ambiental irreparable”.
Minería & Desarrollo con información oficial del Primer Tribunal Ambiental de Chile.