La Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) de Chile volvió a emitir una serie de medidas contra una mina de cobre de Lundin por el socavón que encontraron en julio pasado en Tierra Amarilla. Ahora, el regulador ambiental informó que se han reportado afloramientos de agua en el sector Jocelyn y también una nueva filtración en el caserón Gaby, con un caudal que habría alcanzado los 80 litros por segundo.
La SMA renovó por tercera vez la medida provisional dictada contra la Compañía Contractual Minera Ojos del Salado, titular del proyecto “Continuidad Operacional Mina Alcaparrosa”, en la Región de Atacama.
En esta oportunidad la autoridad fiscalizadora, añadió una nueva medida provisional que busca analizar la disminución del caudal del acuífero respectivo.
Según lo informado por la SMA, en la renovación de medidas se mantiene la solicitud muestreos y análisis hidrogeoquímicos que permitan comparar la calidad del agua de los pozos circundantes al incidente, con las aguas almacenadas en los caserones.
Asimismo, debido a los nuevos antecedentes aportados por la empresa y por información de monitoreo entregada por la Dirección General de Aguas (DGA), se han reportado afloramientos de agua en el sector Jocelyn y también una nueva filtración en el caserón Gaby, con un caudal que habría alcanzado los 80 litros por segundo.
Al respecto, la superintendenta del Medio Ambiente, Marie Claude Plumer explicó que “según los antecedentes analizados por los equipos de la SMA, subsiste el riesgo de daño inminente debido a la conexión de las aguas al interior de la mina con el acuífero del Río Copiapó”.
La SMA les impuso cuatro medidas a Lundin. Deberá identificar todos los sectores de Mina Alcaparrosa que presentan filtración de agua, con la indicación de su nivel, galerías y caserones afectados. También tendrá que entregar un reporte de estimación del volumen total de agua acumulada al interior de la mina, en sus distintos niveles.
Otra de las medidas es la presentación de una propuesta que considere distintas alternativas de obras destinadas a eliminar o disminuir los caudales infiltrados al interior de la mina, tales como sellos y/o tapones, u otras, indicando preliminarmente la factibilidad y eficacia de las alternativas propuestas.
La última medida es presentar una propuesta de plan de disminución del flujo pasante de aguas subterráneas hacia el socavón, incorporando en dicho plan las autorizaciones sectoriales requeridas para su ejecución.
Minería & Desarrollo con información de la SMA y de Reporte Minero.
