El precio de las exportaciones de litio establecido por la AFIP podría limitar la capacidad del país para beneficiarse del mercado cada vez más activo para el material crucial de la batería de vehículos eléctricos, aseguran los empresarios.
Es que tras el escándalo que explotó en Catamarca luego de que se conociera que Livent realizó una presunta subfacturación y evasión fiscal, la Aduana fijó un precio de referencia de 53 dólares el kilo para las exportaciones de carbonato de litio a países como Estados Unidos, China, Japón, Canadá y Tailandia con el fin de abordar lo que calificó de «irregularidades» en el mercado y mejorar la transparencia.
La nueva medida tendrá un «impacto negativo en las empresas con inversiones en Argentina y en el desarrollo de otros proyectos en carpeta», dijo la Cámara de Empresarios Mineros de Argentina (CAEM) por medio de un comunicado.
“Es fundamental para el país poder mantener un marco estable de reglas claras y seguridad jurídica que permita planificar inversiones de carácter productivo”, aseguraron.
En otro punto del escrito, destacaron que «los cambios en las condiciones perjudican las planificaciones de largo plazo que requieren este tipo de inversiones. También es necesario aclarar que las empresas del sector trabajan de forma transparente y respetan la legislación vigente en nuestro país».
Por último, la CAEM remarcó que el país está «frente a un momento en el cual se abre una ventana de oportunidad para el país en relación al litio» y que «se prevé la llegada de inversiones por alrededor de U$D 5.000 millones, solo considerando los proyectos más avanzados».
Minería & Desarrollo con información de CAEM y Reuters.