La compañía canadiense anunció que el plan de transición ha progresado bien y Jack Lundin asumirá el rol de director ejecutivo con efecto inmediato el 1 de enero de 2024. Las expectativas alrededor de su figura son altas en San Juan ya que se espera que logre destrabar la situación en la que se encuentra hoy el proyecto iglesiano para hacerlo avanzar a la construcción.
Con el nombramiento de Jack Lundin ahora dos hermanos se dividirán los puestos directivos clave en la empresa. Adam, el hermano, es actualmente presidente de la compañía. Como se anunció anteriormente, Peter Rockandel- el actual director ejectuvivo- permanecerá en la Junta Directiva hasta el 31 de diciembre de 2023.
«Me gustaría agradecer a Peter y a mis compañeros por permitir que se llevara a cabo una transición tan fluida. Espero aprovechar el progreso significativo que se ha logrado durante el mandato de Peter en la empresa», comentó Jack Lundin.
San Juan y Argentina en general siguen atentamente los cambios corporativos de Lundin ante la posibilidad de que una mina de cobre comience a producir en el país. Es que la empresa continúa retrasando el inicio de la construcción de Josemaría y sigue con los trabajos de ingeniería básica y pre construcción, lo que evidencia un claro retraso en la planificación. Esta situación ya había sido admitida por los propios directivos de la compañía.
Los ojos se posan ahora en los hermanos Lundin y en los planes que tendrán para el proyecto sanjuanino que necesita más de 4100 millones de dólares de inversión para avanzar a las siguientes etapas, según el último dato dado a conocer por la empresa. Ahora se espera que antes de fin de año informe una nueva estimación mientras continúa con las negociaciones para vender el 50% del proyecto, tal como lo viene declarando públicamente el propio Jack Lundin.