Tras una serie de acusaciones cruzadas, el intendente de Andalgalá, Eduardo Córdoba y el gobernador de Catamarca, Raúl Jalil, parecen haber encontrado un punto en común para trabajar en reducir el nivel de conflictividad que hay en la comunidad andalgalense por el proyecto Mara.
El intendente y el gobernador acordaron un trabajo conjunto entre municipio y Provincia para realizar estudios ambientales referidos al proyecto Minera Agua Rica-Alumbrera.
Córdoba se reunió también con la ministra de Seguridad, Fabiola Segura, quien le propuso mantener encuentros periódicos para interiorizarse sobre el trabajo de las fuerzas públicas en el departamento y recibir los planteos del municipio.
En la reunión que mantuvieron, Córdoba le transmitió a la ministra sus inquietudes en torno al acampe de sectores “promineros” que, sostiene, son financiados por la empresa y no son protagonizados por andalgalenses. El intendente había adelantado la semana pasada que las principales preocupaciones giran en torno a los fuertes operativos de seguridad y la “militarización” de la ciudad de Andalgalá.
“La gente no es exacerbada, loca o violenta. Es un planteo netamente ambiental, no político. Va más allá de las representatividades políticas o religiosas y que ha pasado generaciones”, dijo entonces, al tiempo que remarcó que los movimientos asambleístas “son espontáneos”.
La ministra Segura se comprometió a analizar nuevas medidas y posiblemente a intensificar los controles, pero le ofreció al intendente mantener encuentros semanales o quincenales junto a las autoridades policiales de la zona para mantener un trabajo conjunto.
“Hay un desconocimiento del trabajo de la Policía, que desde el área de investigación tiene personas identificadas. Están realizando su trabajo a través de las denuncias y los pedidos de la Justicia”, indicó la funcionaria en declaraciones radiales.
“Nosotros podemos garantizarle la objetividad en el trabajo, que creo que lo venimos realizando y, comprometernos a seguir trabajando en las medidas que estén a nuestro alcance y que podamos complementar con ellos y con el Poder Judicial para que esta situación cese, o podamos tener un control total de ella. Creo que no estamos lejos, siempre que exista un diálogo, un consenso y una acción conjunta que sea productiva y positiva”, destacó.
Días atrás y en el marco de la reunión entre Jalil y Córdoba, las autoridades acordaron avanzar con la conformación de una Mesa Técnico Científica Minera, que contará con la participación de especialistas de los gobiernos provincial y municipal, en una primera etapa, para abordar los estudios necesarios a fin de determinar si existe una potencial afectación de la cuenca del río Andalgalá.
En una segunda etapa, a esta mesa de trabajo se sumarán actores clave de la minería, como la Universidad Nacional de Tucumán y la empresa estatal YMAD.
Según se informó, las autoridades acordaron mantener un canal de diálogo sostenido y dar respuestas conjuntas a toda la sociedad.
Minería & Desarrollo con información de El Ancasti.
