El reclamo, que comenzó hace unas semanas atrás en las oficinas que Lundin tiene en Iglesia, se muda ahora al Centro Cívico donde habrá una reunión entre cámaras de proveedores, la empresa y el Gobierno, que intentará mediar en el conflicto.
Lo que reclaman los empresarios iglesianos es la formación de mesas de trabajo para que la compañía contrate bienes y servicios en esa localidad. Aseguran que esa es la metodología que les permite insertarse como proveedores dentro del proyecto.
Manifestaron, a través de un escrito que entregaron a las autoridades de la empresa y también del Ministerio de Minería, que están disconformes con los procesos de licitación y las rondas de negocios que ha estado realizando Lundin porque entienden que “solo ha generado gastos innecesarios de recursos” y no se ha obtenido la contratación o el desarrollo de los proveedores locales.
Por otro lado, afirman que esa modalidad de trabajo no les entrega previsibilidad ni seguridad y que las licitaciones se realizan en tiempos muy acotados.
“Es por eso que reclamamos comenzar con mesas de trabajo reales, por rubros y sectores y con una metodología distinta (a la que nos proponen). Necesitamos que esas mesas de trabajo muestren las necesidades de corto, mediano y largo plazo, a fin de que podamos prepararnos y poder ofrecer nuestros servicios”, agregaba ese documento que acercaron los manifestantes a Minería & Desarrollo.
Ahí mismo reclamaron “información precisa y certera” e instancias de diálogo y negociación para resolver el conflicto.
En otro escenario, se suma un nuevo conflicto en el que el gobierno mediará para intentar encontrar una solución ante el pedido de los proveedores. Mientras tanto, desde Lundin indicaron hace algunos días a Radio Oasis de Iglesia, que la empresa está en una etapa de revisión de ingeniería básica y de su cronograma de trabajos. Y en ese sentido, la gerente de Desarrollo Sustentable, Verónica Cunto, admitió que “las compras y la mayoría de las contrataciones se dan en la urbe de San Juan y no en Iglesia”.