El oro registró otro máximo histórico hoy miércoles por la mañana, ya que las incertidumbres en torno a las elecciones presidenciales de Estados Unidos y el conflicto en Medio Oriente mantuvieron alto el atractivo del lingote.
Se trata de una escalada que no tiene parámetros y que beneficia a las empresas y los estados en donde operan las minas, ya que en todos los casos esas variaciones se traducen en el pago de mayores royalties o regalías a los gobiernos en donde se ubican las operaciones.
Esto, por ejemplo, beneficiará a la provincia de San Juan y al municipio de Iglesia, con el ingreso de fondos extras no presupuestados por la operación que Barrick Gold y Shandong hacen de la mina Veladero.
Los futuros negociados para diciembre en el CME alcanzaron brevemente los 2.801,70 dólares la onza, superando el máximo histórico establecido la semana pasada, en el comercio nocturno.
El repunte se produce a pesar del aumento de los rendimientos de los bonos y de la fortaleza del dólar estadounidense, que normalmente habrían pesado sobre el metal precioso.
Esto eleva la ganancia del lingote en lo que va de año a aproximadamente el 34%, lo que lo convierte en uno de los activos con mejor rendimiento de 2024.
“El posicionamiento del mercado es elevado antes de las elecciones, pero también en previsión de nuevos recortes de tasas de la Fed y una incertidumbre geopolítica y del mercado más amplia”, dijo la analista de Standard Chartered Plc Suki Cooper en una nota citada por Bloomberg.
“En un escenario de victoria de Trump, los mercados se centrarán en las consecuencias de aranceles más amplios, así como en las presiones inflacionarias como resultado de dichos aranceles”.
“El oro cotiza al alza durante la semana, a pesar de la desinflación de las primas de riesgo en otros lugares, lo que confirma que el foco sigue siendo la elección estadounidense y, especialmente, la perspectiva de un Trump 2.0”, dijo Saxo Bank en una nota a Bloomberg.
“Podría traer consigo mayores perturbaciones políticas, aranceles comerciales y mayores riesgos geopolíticos”.
La demanda mundial de oro aumentó alrededor de un 5% en el tercer trimestre, lo que supone un récord para el período y eleva el consumo por encima de los 100.000 millones de dólares por primera vez, según el Consejo Mundial del Oro.
El aumento (que hizo que los volúmenes subieran a 1.313 toneladas) se vio respaldado por flujos de inversión más fuertes desde Occidente, incluidos más individuos con un alto patrimonio neto.
El repunte del oro también se produce tras los nuevos datos económicos publicados el martes, que mostraron que las vacantes de empleo en Estados Unidos cayeron mucho más de lo esperado, mientras que la confianza del consumidor aumentó por encima de todas las estimaciones.
Los inversores ahora esperan más datos a finales de esta semana para evaluar mejor la postura de la Reserva Federal sobre las tasas de interés.
Actualmente los mercados están descontando una probabilidad de casi el 100% de que el banco central estadounidense recorte las tasas en 25 puntos básicos en noviembre.
“El oro debería mantener su tendencia alcista e incluso podría coquetear con los 2.800 dólares en los próximos días, siempre que los riesgos electorales estadounidenses sigan pesando sobre el sentimiento del mercado, mientras que las expectativas de recorte de tasas de la Fed se mantengan intactas”, dijo Han Tan, analista jefe de mercados de Exinity Group, el martes.
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