Alfredo Vitaller (Lundin), Rob McEwen (Los Azules) y ahora Mark Bristow (Barrick) lo remarcan. Es unánime la queja por las condiciones que impone la Nación para el desarrollo de la minería metalífera en donde la inflación destruye los presupuestos, los impuestos parten las ecuaciones económicas y el acceso al dólar para los exportadores se le reconoce solo al campo y a Coldplay.
Todos los CEOS de las empresas mineras en San Juan dicen lo mismo: no hay un compromiso de las autoridades nacionales para que se desarrollen los proyectos mineros de Cobre, Oro y plata en la provincia. Cámaras empresarias, asesores, gobernadores lo advierten una y otra vez a quienes tienen en su mano la responsabilidad de marcar las políticas públicas para el desarrollo de nuestras comunidades.
Parece que la Nación mira y gestiona solo a los productores Litio (los grandes salares están en Salta, Jujuy, La Rioja y Catamarca, de donde es la secretaria de minería de la Nación, Fernanda Ávila) mientras desde aquí ya se dijo que a Veladero solo le quedan 7 años de vida y a Gualcamayo 2, en medio de tropezones y recurrentes quejas por la extraña forma de la construcción que eligió Lundin para Josemaría.
En el medio están los proveedores mineros (más divididos que nunca con 7 cámaras), los empleados (con sindicatos en silencio) y las autoridades provinciales que no encuentran en la Nación un interlocutor válido que se haga cargo de las consecuencias de su inacción.
Es que se adoptaron todas las medidas que la provincia podía realizar para apalancar estos proyectos que van desde el reconocimiento de adelanto de regalías a las obras que sean consideradas prioritarias por la comunidad, lo mismo que un contexto político y social único para el desarrollo de la minería.
Dólar Coldplay
En medio de este mar enrarecido entre la Nación y las provincias ya no sorprende que la Nación ponga en marcha el denominado “dólar Coldplay”, o sea el requerimiento inmediato de divisas para que organizadores de recitales y conciertos de artistas internacionales puedan disponer de dólares a una cotización única.
Ese tipo de cambio, que será el dólar oficial más el impuesto PAIS, permitirá a los organizadores de espectáculos tener acceso inmediato a las divisas, pero pagando un dólar de aproximadamente $ 200 a los niveles actuales.
En la Nación no son buenos administradores, pero nadie come vidrio. Es más fácil enfrentar a la minería -en donde las empresas mantienen estructuras de miles de empleados, otros cientos de proveedores pagan impuestos en tiempo y forma, sin mencionar las inversiones multimillonarias ya realizadas-, que a cientos de miles de fans que ya sacaron entrada para algunos de los más de 170 espectáculos con artistas extranjeros ya confirmados y que ahora sus organizadores tendrán acceso a un dólar diferencial para girar las divisas al exterior.
Esta solución permitirá transitar sin problemas los 10 recitales que Coldplay tiene programados en la Argentina, pero también los shows de decenas de artistas del exterior que se presentarán en los próximos meses.
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