A un año de la asunción del ministro Juan Pablo Perea al frente del área Minera de San Juan, el funcionario realizó un primer balance y dejó en claro definiciones de las políticas impuestas desde la gobernación de Marcelo Orrego, como por ejemplo la participación de las autoridades a la hora del anuncio de las declaraciones de impacto ambiental.
Para quien dirige la política minera, fue un año de “crecimiento sostenido” y se cumplió con la evaluación de dos Informes de Impacto Ambiental (IIA) que pusieron a San Juan al frente del país en lo que se refiere al análisis de los estudios ambientales. Iniciativas que entiende, deben ser acompañadas con un trabajo del Plan Estratégico Provincial.
Juan Pablo Perea, habló además de la Mesa del Cobre, de la participación que algunos municipios impulsan para el control de proyectos mineros; lo mismo que el ingreso de BHP a la minería sanjuanina con Josemaría y Filo del Sol. Párrafo aparte destinó al papel de los proveedores en la cadena de valor minera.
¿Cuál es el balance que hace de la actividad minera en San Juan?
La actividad minera en San Juan ha mostrado un crecimiento sostenido. Durante el 2024 hemos sido testigos de importantes avances en el sector: La entrega de dos Declaraciones de Impacto Ambiental (DIA). La implementación del RIGI y en ese contexto por parte del Gobierno, la generación de confianza y las herramientas necesarias para el logro de consensos tanto en Nación, provincia y municipios.
Las comunidades también han sido parte importante, con una mirada centrada en concretar beneficios para ellas, en particular en aquellos departamentos de influencia minera. En ese sentido, se realizó un intenso trabajo a través del Plan Estratégico provincial.
¿Por qué no hubo participación del gobernador o suya en la presentación de estos documentos? Esto teniendo en cuenta que otros gobiernos si lo hicieron.
Nuestra obligación como Gobierno es generar las condiciones que permitan que las inversiones mineras lleguen a la provincia, y ser absolutamente eficientes y rigurosos en la evaluación y control de la actividad de las empresas. Consideramos que la obtención de la declaración de impacto ambiental es algo que debe ser comunicado por cada empresa según su criterio, sin que se preste a ningún tipo de aprovechamiento político.
¿El gobernador Marcelo Orrego al frente de la mesa del cobre en Argentina y usted como secretario ejecutivo abre oportunidades para San Juan? ¿Qué es lo que quiere el gobierno profundizar con estas acciones?
El Gobernador dio muestras claras de que la minería en San Juan es una política de Estado y, desde que asumió, mostró ese compromiso con una agenda internacional, nacional y local vinculada a la minería. Desde mi rol, acompaño ese lineamiento que tiene que ver con fomentar gestiones y recursos que beneficien a nuestra minería.
Respecto de la posición del Gobernador como presidente de la Mesa del Cobre, entiendo que es un reconocimiento al trabajo que lleva adelante vinculado a la minería y que se ve reflejado en los avances realizados en este año de gobierno. Para el Gobierno de San Juan, es sumamente relevante el desarrollo del sector minero, entendiéndolo como un dinamizador de la economía y generador de empleo, cuestión fundamental en una provincia con las características de la nuestra. El objetivo del Gobernador es posicionar a San Juan como líder en el sector minero a nivel mundial.
Algunos intendentes entienden que deben crear direcciones de minería o similares para auditar o controlar a los proyectos mineros. ¿Cómo ven esas acciones?
Conforme al art.124 de la Constitución Nacional, las provincias detentan el dominio originario de los recursos naturales existentes en su territorio. Por lo que los municipios carecen de potestad para conceder derechos mineros.
El Código de Minería de la Nación establece el marco legal para la exploración y explotación de recursos minerales. Es importante destacar entonces que, aunque los municipios tienen competencia en materia ambiental, la regulación y el control de la actividad minera es una atribución provincial.
Valle Fértil es uno de los departamentos que tiene expectativas en la minería. ¿Se podrá desarrollar o apoyar esas expectativas?
El desarrollo y las expectativas no son solo para Valle Fértil, sino para todos los departamentos mineros de la provincia. Estamos trabajando para que todos crezcan y esperamos estar a la altura.
En el caso puntual de Valle Fértil. Estamos en contacto con sus productores, de hecho, recientemente una comisión de la Secretaría Técnica se acercó para informar sobre el Registro de Productores, Comerciantes e Industriales mineros. El fin es ordenarlos, porque así eventualmente podrán acceder a beneficios.
En Londres, las autoridades de BHP tomaron contacto con el gobernador y con usted para hablar de las inversiones en Josemaría. ¿Cuáles son los pasos que se vienen para el desarrollo de ese proyecto y de Filo del Sol?
Tanto BHP como Lundin, se encuentran en una etapa que se denomina “Closing” que tiene que ver con el cierre de finalización de acuerdos. El acuerdo está previsto, esté para el primer trimestre de 2025.
Finalizadas las formalidades, entendemos se comenzará con las obras. La empresa está en un proceso licitatorio del camino para la construcción de los tramos E y F del Corredor Norte.
Los proveedores temen que se radiquen o vengan proveedores de otros países para radicarse en San Juan -y aprovechar este boom que se viene con la construcción de proyectos mineros en la provincia-, ¿cuál es el mensaje que reciben de las autoridades provinciales?
Debemos contribuir a los estándares de calidad que exige este desafío. Para ello estamos en el diseño de herramientas que permitan fortalecer a nuestros proveedores y los estándares de calidad que los haga competitivos. Confiamos en el potencial de nuestros proveedores, pero deberemos estar a la altura de las exigencias.
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