La compañía canadiense busca invertir en nuevas oportunidades de oro y cobre en asociación con el gobierno de la República Democrática del Congo, basándose en el éxito de Kibali, la que ha convertido en la mina de oro más grande de África, dijo el presidente y director ejecutivo, Marcos Bristow.
En declaraciones a los medios durante una visita a la mina, Bristow dijo que Kibali estaba en camino de otro año de creación de valor gracias a un sólido desempeño de producción. También estaba bien preparado para reemplazar las onzas que se estaban agotando por la minería con más de la misma alta calidad.
“Kibali ha transformado lo que antes era la región desfavorecida del noreste del país en una nueva frontera económica y un floreciente centro comercial. De nuestra inversión de 5 mil millones de dólares en la República Democrática del Congo, más de la mitad se ha gastado en contratistas y proveedores locales, muchos de cuyo crecimiento hasta convertirse en negocios sustanciales hemos promovido mejorando sus habilidades comerciales y técnicas y brindándoles oportunidades para ejercerlas. La tercera central hidroeléctrica de Kibali, por ejemplo, fue construida por un equipo exclusivamente congoleño”, afirmó.
Kibali anunció recientemente que una colaboración con ARSP, el regulador público que supervisa el sector de subcontratación del país, ya ha dado como resultado una serie de iniciativas, basadas en la estrategia de contenido local líder en la industria de Kibali.
Mientras tanto, Kibali continúa su transición a la energía renovable con la puesta en marcha prevista de una planta solar de 16 MW y baterías asociadas en 2025. La planta aumentará el uso de energía renovable del 81 % al 85 %, y la mina funcionará únicamente con energía renovable durante los seis -mes temporada de lluvias.
