El presidente de la Cámara de Proveedores Mineros de Calingasta, Alfredo Amín, reclamó que el Ministerio de Minería imponga condiciones de contratación al proyecto Josemaría para beneficiar por igual a las empresas locales como una forma de evitar la pelea en la que jachalleros e iglesianos se encuentran por la definición de zona de influencia.
“Tengo miedo de que Josemaría que está a punto de arrancar no cambie nuestra realidad y los que somos pobres, sigamos siendo pobres, sin poder alcanzar el desarrollo que buscamos porque las utilidades las empresas más grandes se las llevan fuera de la provincia y de la Argentina. Nosotros no”, declaró en Radio Sarmiento.
Los condicionantes que reclama Amín y que busca que queden impuestos en la Declaración de Impacto Ambiental de Josemaría y que incluya procedimientos y metodologías en esos documentos “que sean fáciles de auditar y de seguir”.
En su línea de pensamiento, las empresas locales están en condiciones de respetar lo que piden las empresas mineras: misma calidad y mismo precio, pero no son priorizados en los contratos.
“Respetando esos criterios, las empresas mineras comenzarán a desarrollar como corresponde a la comunidad. Hoy eso no está sucediendo”, aseguró.
La posición de los proveedores calingastinos, asegura Amín, ya fue impuesta al ministro Carlos Astudillo y “eso aliviaría muchos de los problemas que hoy tiene la actividad en San Juan, cuando hay permanentes quejas por la falta de contratación de proveedores locales”.
Alfredo Amín dijo además que todas las empresas mineras hablan de su compromiso con los proveedores locales, pero la realidad demuestra otra cosa diferente y eso es porque “muchas de ellas prefieran contratar a dos empresas para que se hagan cargo de lo que pueden hacer veinte y con eso se evitan todo tipo de problemas”.
El dirigente empresario contó que muchas veces las empresas mineras tienen prejuicios con respecto a los proveedores locales y no valoran lo que se hace aquí en San Juan.
“No queremos que empresas de cualquier parte del país o del extranjero nos subcontraten, queremos que esas firmas, si no existen los servicios o bienes aquí, se vean obligadas a contratarnos, a asociarse con nosotros, a capacitarnos, a respetar nuestra escala de servicios”, enfatizó.
La pelea de proveedores o de comunidades para ser zona prioritaria de influencia de Josemaría o de otro proyecto minero, “son peleas de pobres contra pobres”, recalcó en una entrevista del programa Pensar San Juan de LV5 Radio Sarmiento.
“Queremos trabajar en un plan programático para que los resultados de las inversiones mineras queden en San Juan. Yo no creo que estas empresas saquen de sus ganancias y vuelvan a ponerlo en la provincia como hacemos nosotros donde el 90% que ganamos lo reinvertimos aquí”, ejemplificó.
Según su visión es el ministerio de Minería -junto con los municipios- el que debería dar las garantías para que los proveedores chicos puedan participar con éxito en la discusión con las empresas mineras. “Sino va a pasar lo que ya está pasando que es que vienen empresas de Mendoza, donde esta prohibida la minería, a desarrollarse en San Juan pero sin dejar absolutamente nada”, concluyó.
