Una vela por Josemaría, pero no se olviden de Veladero, Gualcamayo y Sarmiento

Por Miguel Martín

El día de la minería encuentra a los sanjuaninos en medio de un proceso de evaluación ambiental de un proyecto minero: Josemaría. Algo que no sucedía desde 2014, cuando comenzaron a analizarse las variables ambientales de la mina de oro y plata Casposo en Calingasta.

Josemaría del grupo Lundin es la principal esperanza de la continuidad de la minería en la provincia de San Juan ya que las otras dos minas que están en operación está una iniciando su etapa de cierre -Gualcamayo en Jáchal- y la otra en su etapa de madurez como Veladero con operaciones aseguradas hasta el 2028.

Esta transición es lo que les da a los mineros la certeza de que se puede seguir en un camino de crecimiento y construcción de una provincia distinta.

A pesar de que en casi todas las mesas de los mineros es imposible abstraerse de lo que se viene con Josemaría (algo más de 3 millones de dólares de inversión), no se puede dejar de reconocer y destacar el papel de los trabajadores, proveedores y empresas ligadas a Veladero y Gualcamayo en la economía de San Juan.

Esas dos minas tienen en sus espaldas junto a miles de empresas del agro, el comercio y la industria, la recuperación económica de toda la provincia en medio de esta pandemia.

Muy parecida a la época que le tocó vivir a Domingo Faustino Sarmiento.

El prócer sanjuanino tenía un proyecto integral para sacar la provincia de San Juan de su postración económica. Creía que la minería y la agricultura constituían junto con la educación, la base del desarrollo de su pueblo. La historia le dio la razón.

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