Tras una medida de fuerza de 12 horas, los representantes de Minera Andina del Sol y del gremio AOMA (Asociación Obrera Minera Argentina) firmaron un acuerdo en la Subsecretaria de Trabajo para que vuelva la actividad en la mina iglesiana. El arreglo se dio en el marco de la conciliación obligatoria que se dictó en la mañana.
El reclamo del sindicato minero se inscribe en una puja que hay para que los empleados de las empresas contratistas sean considerados bajo su encuadramiento sindical. De aprobarse esa posición, casi todas las actividades en la mina tendrían un solo representante colectivo, sin importar la actividad o convenio.
Según informó el sitio Mining Press, a primera hora de la mañana, las autoridades el gobierno provincial les hicieron conocer su disgusto a los mineros y no dudaron de calificar de “inoportuna” a la medida de fuerza que se asemeja a las practicas extorsivas que pone en marcha para estas mismas situaciones el combativo gremio de camioneros.
Otras fuentes oficiales indicaron a Minería y Desarrollo que en realidad el planteo local se agigantó desde la conducción de nacional de AOMA, que conduce Héctor Laplace, más cercano a José Luis Gioja, que al gobernador Sergio Uñac.
De todas formas, fue imposible conocer de primera mano que fue lo que llevó a impulsar estas medidas de fuerza y si la interna del PJ se metió en ellas: El secretario general de AOMA Ivan Malla, apagó su teléfono y de igual manera no hubo respuesta al pedido de información desde la gerencia de Comunicaciones de Barrick.
Según destacaron desde la Subsecretaría de Trabajo las conversaciones por el encuadramiento sindical de los empleados de empresas contratistas seguirán en la ciudad de San Juan.
AOMA viene de alcanzar hace 15 días de un aumento salarial de un 20% en todos los salarios de los empleados de Veladero y Gualcamayo. Las tratativas se dieron en medio de un proceso de conciliación obligatoria ya que no había consensos entre la patronal y el sindicato.
Las gestiones del gobierno para que se alcanzara un acuerdo salarial y la repentina medida de fuerza de ayer habrían terminado de irritar a los gestores de «buenos oficios» para intimarlos a levantar la medida de fuerza.
