BHP detendrá sus operaciones de níquel en Australia Occidental a partir de octubre, mientras lucha por superar los desafíos que plantean una disminución sustancial en los precios del níquel y un exceso de oferta global.
El gigante minero, que había advertido al mercado sobre este posible resultado a principios de este año, dijo que revisará su decisión que afecta tanto a las operaciones de Nickel West como al proyecto West Musgrave en febrero de 2027.
“Al igual que otros en el sector del níquel australiano, no hemos podido superar los importantes desafíos económicos impulsados por un exceso de oferta global de níquel”, dijo la presidenta de BHP Australia, Geraldine Slattery.
BHP señaló que ofrecería oportunidades de redistribución en otras operaciones de la compañía o un pago por despido a los 2.500 empleados de la división.
La empresa creará un fondo comunitario de 20 millones de dólares australianos (13,6 millones de dólares) para apoyar a las comunidades locales y a las empresas afectadas por la suspensión. También ha aumentado su deterioro no monetario en 300 millones de dólares hasta alcanzar los 3.500 millones de dólares de cargo por deterioro contra el valor contable de la empresa, como anunció en febrero.
La ministra de Recursos, Madeleine King, calificó la decisión de “decepcionante” y señaló que el gobierno federal había trabajado con BHP y el sector del níquel en general en respuestas políticas para apoyar la actual producción australiana de níquel.
“Agregamos níquel a la lista de minerales críticos en febrero, lo que hace que los proyectos de níquel sean elegibles para ser considerados bajo la facilidad de minerales críticos de 4 mil millones de dólares australianos”, dijo King en un comunicado.
M&D con información de Mining.com.
