Se trata de la firma Hydrolik SAS que realizaba tareas en el proyecto de litio Mariana. Mientras que desde la empresa ubicada en Pocito denunciaron que le robaron equipos, en Salta la acusaron de estafar y emitir cheques sin fondos.
A fines de junio se conoció que la empresa sanjuanina de perforación de San Juan había denunciado en la Justicia de Salta que le robaron equipos valuados en 400 millones de pesos.
Según publicó Tiempo de San Juan, Hydrolik, ubicada en el departamento Pocito en Lateral oeste de Ruta 40 entre calle 6 y 7, fue contratada por Litio Minera Argentina, filial de la china Ganfeng Lithium que opera el proyecto salteño, para instalar la plataforma con una torre de perforación marca Frank Cabot 450, el cual fue alquilado a la firma M&P Servicios Especiales de Tartagal.
El problema habría comenzado cuando la máquina sufrió un desperfecto y la empresa no consiguió quien la reparara, por lo que guardaron equipos y herramientas en un conteiner. Luego de eso, la compañía minera impidió el acceso a los operarios de perforación que, semanas después cuando pudieron ingresar al proyecto, descubrieron que les habían robado, según consta en la denuncia.
A raíz de esto, Hydrolik realizó una denuncia contra Litio Minera Argentina y acusó a Servicios Especiales de Tartagal por supuesta estafa.
Ahora, en el medio de acusaciones cruzadas, se conoció que la empresa sanjuanina fue denunciada en Salta por estafa y que esa maniobra estafa superaría el millón de dólares.
Sergio Heredia, abogado penalista que representa a presuntos estafados por Hydrolik señaló que es una causa muy compleja en la que Litio Minera Argentina S.A. Ganfeng, contrató HydroLik de San Juan para hacer dos pozos en el Norte, con cifras de costos millonarios.
“Se habla de más de 2 millones de dólares, recibiendo un anticipo de 700 mil dólares. El primer problema es que esa empresa ya tenía antecedentes económicos malos. Hasta de tipo delictivo”, sostuvo Heredia a Nuevo Diario de Salta.
El letrado agregó que la firma sanjuanina tercerizó sus servicios y le alquiló equipos a otra empresa de Tartagal EMIPE.
“A pesar del anticipo la empresa sanjuanina empieza a retacear los pagos a los empleados, y a la empresa a la que se le alquilaba los equipos. Y la cadena de falta de pago se va agrandando. Llegando a emitir cheques sin fondo. Todo esto hasta que EMIPE rescinde el contrato y embarga a la firma Hydrolik por 800 mil dólares”, dijo Heredia.