Mediante la supervisión de los proyectos mineros de San Juan, los inspectores perpetúan el legado de Rickard, la razón histórica por la que cada 30 de mayo se celebra este día.
En el marco del «Día del Inspector en Minas», que se conmemora cada 30 de mayo desde su oficialización por la legislatura sanjuanina en 2015, los profesionales del sector reflexionan sobre los retos emergentes en su campo.
Esta fecha no es arbitraria; tiene sus raíces en un hito significativo: fue en 1862 cuando Domingo Faustino Sarmiento, figura clave en la historia argentina, nombró a Francisco Ignacio Rickard, de origen irlandés, como el primer inspector minero nacional.
En su rol pionero, Rickard inspeccionaba las riquezas subterráneas de San Juan, enfocándose en Jáchal, Calingasta y Valle Fértil, y reportaba sus hallazgos a Sarmiento, quien era un ferviente promotor de la minería.
Hoy, los inspectores perpetúan este legado, supervisando y regulando los proyectos mineros de la región. Su labor es vital para garantizar que se cumplan los estándares de seguridad y salud ocupacional.
La Secretaría de Gestión Ambiental y Control Minero es el punto de partida de estos expertos, quienes visitan instalaciones dedicadas a la extracción de bentonita, la producción de cal, y la explotación de canteras de cuarzo, así como proyectos metalíferos en distintas fases.
Están equipados con vehículos de avanzada tecnología y se apoyan en un sistema de 14 cámaras de vigilancia operativas día y noche, que monitorean puntos estratégicos de San Juan, asegurando así la integridad de la actividad minera en la provincia.
