EE.UU. invierte 930 millones de USD en infraestructura de carga de vehículos eléctricos
Si bien la adopción de vehículos eléctricos (EV) se está disparando en todo el mundo y en particular en los EE.UU., muchos compradores potenciales continúan expresando preocupaciones sobre los problemas de carga que habrá en cada vivienda y en cada ciudad.
Varios informes recientes de la industria han colocado la disponibilidad de las estaciones de carga como una preocupación clave que está frenando nuevas compras.
Impacto en los clientes
Una encuesta reciente de la consultora McKinsey descubrió una serie de temas que afectan las ventas de vehículos eléctricos y cree que las actitudes de los consumidores sobre la carga podrían influir en el mercado de vehículos eléctricos y al mismo tiempo abrir nuevas oportunidades.
El análisis de McKinsey muestra que las ventas anuales de vehículos de pasajeros electrificados superaron las 10.000 unidades en 2022, lo que supone un aumento de más del 50 % con respecto a las ventas en 2021. Predice también que las ventas alcanzarán alrededor de 40 millones en 2030.
Sin embargo, McKinsey también señala que un aumento de esta escala tiene repercusiones que van mucho más allá de las cifras de ventas.
«En primer lugar, será necesario un aumento igualmente impresionante en la disponibilidad de cargadores públicos y privados».
“En Estados Unidos, por ejemplo, había alrededor de 2,6 millones de puertos disponibles en 2022, pero, dado que el número de vehículos eléctricos aumenta cada año, el país necesitará aproximadamente 9,5 millones de puertos para 2025 y 28 millones para 2030”, señala el informe.
El informe de McKinsey también afirma que, si el crecimiento de la infraestructura de carga de vehículos eléctricos no logra seguir el ritmo de la demanda, los consumidores pueden dudar en abandonar los vehículos con motor de combustión interna.
Otros problemas de carga, incluidas las persistentes preocupaciones de los consumidores acerca de poder cargar tan cómodamente como pueden cargar combustible hoy en día, también podrían frenar la adopción generalizada de los vehículos eléctricos.
Inversión estadounidense
Este problema se ha identificado claramente en todo el mundo, y el gobierno de EE. UU. anunció esta semana que invertiría 930 millones de dólares en subvenciones para que al menos 500.000 cargadores públicos estén disponibles para 2030.
El gobierno calificó la creación de una red nacional de carga de vehículos eléctricos como crítica, y las ventas de vehículos eléctricos en el país se han más que cuadriplicado.
Actualmente hay más de 4 millones de vehículos eléctricos en circulación, mientras que el número de puertos de carga disponibles públicamente ha aumentado casi un 70 %.
Las empresas privadas han visto la oportunidad y se espera que inviertan más de 232 mil millones de dólares en la cadena de suministro de vehículos eléctricos y baterías.
“Estados Unidos lideró la llegada de la era automotriz y ahora tenemos la oportunidad de liderar el mundo en la revolución de los vehículos eléctricos, asegurando empleos, ahorros y beneficios para los estadounidenses en el proceso”, dijo el Secretario de Transporte de Estados Unidos, Pete Buttigieg.
«Esta financiación ayudará a garantizar que los cargadores de vehículos eléctricos sean accesibles, confiables y convenientes para los conductores estadounidenses, al mismo tiempo que creará empleos en la fabricación, instalación y mantenimiento de cargadores para los trabajadores estadounidenses».
Minería & Desarrollo | Agencias
