El presidente de Chile, Gabriel Boric, anunció la estrategia nacional del litio que se compone de cinco ejes y que pretende entregar al Estado el control de la producción de litio, permitir la participación de privados y renegociar los acuerdos con SQM y Albemarle, las dos empresas que hoy producen litio en Chile, en el Salar de Atacama.
“Nuestro desafío es que nuestro país se transforme en el principal productor de litio del mundo, aumentando de esta manera su riqueza y desarrollo, distribuyéndola justamente, al mismo tiempo que protegemos la biodiversidad de los salares”, dijo Boric.
Los cinco ejes incluyen la creación de una Empresa Nacional del Litio, cuyo proyecto de ley que la crea será enviado el segundo semestre; un esfuerzo de exploración, explotación y agregación de valor con la colaboración privada; el avance a nuevas tecnologías de extracción de litio que minimicen su impacto en los salares; la participación de las comunidades aledañas a las faenas y la generación de productos con valor agregado.
Pero además impulsa una renegociación de los pactos actuales en el mayor yacimiento chileno: el Salar de Atacama, el único lugar donde se extrae litio hoy día y que representa el 30% de la producción mundial del recurso. “Dada su relevancia en la producción y en las reservas de litio, el Salar de Atacama merece una especial atención en nuestra estrategia”, afirmó Boric en la cadena nacional.
Hoy en el Salar de Atacama operan dos empresas privadas: SQM y la estadounidense Albemarle. La primera vendió el año pasado 157 mil toneladas métricas de carbonato de litio, el 75% de lo que produjo Chile en 2022. Albemarle produjo cerca de 50 mil toneladas, el 25% de la producción chilena. SQM tiene el 20% de la producción mundial y su contrato termina en 2030. El convenio con Albemarle, sin embargo, finaliza en 2043. Boric anunció que respetarán esos contratos, pero impulsará su renegociación: el objetivo, controlar la producción del Salar de Atacama para el Estado.
“Somos un país serio y confiable, hemos respetado y seguiremos respetando los contratos vigentes y sabemos que en el año 2030 termina el contrato de arrendamiento a privados de una parte importante del Salar de Atacama”, dijo en relación a SQM, la empresa en la que participan Julio Ponce y la china Tianqi.
“Por ello, he instruido a Corfo, la institución que administra nuestras reservas de litio, solicitar a Codelco la búsqueda de los mejores caminos para lograr desde ya la participación del Estado chileno en la extracción de litio en el salar de Atacama. Así, Codelco será nuestro representante frente a las empresas que actualmente están en el salar, para tener una participación del Estado antes del vencimiento de los contratos vigentes”, indicó Boric.
El mandatario agregó luego dos consideraciones. La primera es la pretensión de obtener el control de la operación del Salar de Atacama. “En caso de conformarse una empresa público-privada que explote el litio del salar de Atacama, ésta será controlada por el Estado a través de Codelco”, anticipó Boric.
“En segundo lugar, el Estado de Chile respetará íntegramente lo establecido en los contratos vigentes. Es decir, una anticipada participación del Estado en el salar de Atacama, será fruto de un acuerdo con quienes actualmente tienen los derechos para explotar el litio”, dijo Boric.
Una minuta difundida entre parlamentarios oficialistas durante la mañana ya anticipaba este objetivo estratégico entre los anuncios concretos que luego oficializó Boric. “Estrategia para la entrada del Estado como actor productivo en el Salar de Atacama. La estrategia se implementa el 2023 y opera a contar de 2024″, decía ese texto.
Con ello, será Codelco la que deberá renegociar con SQM cambios en los contratos hasta 2030. El incentivo para SQM es el horizonte futuro: tiene aún seis años y medio para explotar el Salar de Atacama y luego de 2030 podría operar otro actor. El Estado tiene plazo hasta 2027 para volver a licitar los derechos de SQM.
El Estado arrienda, a través de Corfo, 81 mil hectáreas a SQM para la explotación del litio. La estadounidense Albemarle tiene solo 16 mil hectáreas, el 20% de lo que tiene su competidor. SQM, además, tiene autorizada una cuota de extracción de salmuera por 1.700 litros por segundo, versus los 442 litros por segundo de Albemarle.
La última renegociación con Albemarle y SQM las realizó en 2016 y 2017 la administración de Corfo que encabezó Eduardo Bitrán, entonces vicepresidente ejecutivo de Corfo. Bitrán otorgó nuevas cuotas a ambas empresas, lo que permitió aumentar la producción de litio en Chile, pero a cambio aumentó el royalty a pagar a una escala de tasas marginales: cuando el precio supera los US$ 10 mil la tonelada métrica, Corfo recibe el 40% del mayor valor. El año pasado, SQM vendió a un promedio de US$ 52 mil la tonelada.
Minería & Desarrollo con información de La Tercera.