Con el RIGI el gobierno nacional espera destrabar inversiones en minería, sobre todo en litio y cobre, pero el mayor flujo de ingreso de divisas al país se daría entre 2026 y 2028, que es cuando las compañías cupríferas estiman el inicio de la construcción de sus minas.
En el marco del Seminario Internacional del Litio realizado en la provincia de Jujuy, Forbes dialogó en exclusiva con el secretario de Minería de Milei, Luis Lucero, quien analizó la situación actual y adelantó cómo será el crecimiento en materia de exportaciones.
«Que los grandes nombres de la industria internacional están confiando en la Argentina, ya es un hecho. Hoy hay una confianza que no existía dos o tres años atrás. Compañías como Río Tinto o BHP en el pasado decidieron dejar Argentina porque la consideraban un lugar inhóspito para invertir. Hoy las dos están invirtiendo y eso es una gran señal«, afirmó respecto a las adquisiciones de los dos gigantes de la minería mundial, uno de los principales temas de debate del evento.
A corto plazo, el funcionario sostuvo que habrá «un salto en las exportaciones» por la puesta en marcha de dos grandes plantas a fin de este año. «En este semestre va a comenzar a exportar Eramine y a fin de octubre se pone en marcha una planta de hidróxido de litio de Posco. Ambos en Salta», explicó.
Sin embargo, el periodo de mayor dinamismo en términos de inversiones se vería en los próximos tres años, justamente porque coinciden con la ventana de oportunidad que ofrece el RIGI para que las mineras apliquen y tengan los beneficios del régimen de promoción.
«Los próximos dos años o tres van a ser muy promisorios. Vamos a escuchar grandes números de inversión en litio y en cobre. Y probablemente tengamos sorpresas en otros minerales como oro y plata», destacó Lucero.
Los números de la secretaría marcan un ingreso de 1.600 millones de dólares de inversión en 2025, 17.900 millones entre 2026 y 2028, y otros 4.000 millones en 2029. En materia de exportaciones, se pasarían de los 4.000 millones de dólares que acapara hoy la industria minera, a 13.000 millones en 2029 y 24.000 millones en 2032.
En un principio, el mayor aporte estaría dado por el litio, cuyos proyectos tienen un plazo de desarrollo más rápido. Así, de los 800 millones de dólares que exporta hoy en día este mineral, se saltaría a 5.000 millones en 2027, 7.500 en 2029, 9.500 en 2031 y 11.700 y 2034.
En cambio, el cobre recién empezaría a exportar en 2029 con 2.900 millones de dólares, en 2031 llegaría a 8.700 y en 2032 a un plateau de 11.700. Con lo cual, estos dos productos entrarían en el top 5 de las principales exportaciones argentinas junto con la soja y sus derivados, el maíz, el petróleo y el gas.
De todas maneras, las proyecciones del Gobierno son algo optimistas y es probable que no se terminen alcanzando esas metas. Desde la Cámara Argentina de Empresas Mineras, por ejemplo, piensan que los niveles de producción estarán un 20% por debajo de lo pronosticado por la Secretaría de Minería para 2027 y un 10% atrás de lo previsto para 2030.
Si bien en la industria todos coinciden en que todos los escenarios de crecimiento son muy buenos para el litio y el cobre, hay un gran interrogante con relación al oro y la plata, donde sus yacimientos están maduros, en una curva de producción declinante y sin grandes inversiones previstas.
Ante la consulta de Forbes, Lucero se mostró confiado en que «la macroeconomía va a seguir mejorando y el riesgo país irá bajando» para crear un clima más propicio y señaló que no habrá nuevos incentivos que impliquen un sacrificio para el fisco más allá del RIGI.
«Todos tenemos que ser creativos. Las provincias pueden contribuir con alguna medida como el tema de regalías. Un no incremento de regalías sería una medida muy interesante para beneficiar la exploración en la Patagonia«, manifestó.
No obstante, en las empresas son mucho más pesimistas y dicen que sin beneficios adicionales, en cuatro años «prácticamente habrá desaparecido la producción de oro y plata en el país», salvo por algún proyecto muy puntual.
M&D con información de Forbes.